
La práctica del Qigong puede resultar una tarea complicada para muchas personas. Una de las bases de la práctica del Qigong es aprender las Tres Regulaciones para la práctica correcta. Estas tres regulaciones consisten en la regulación del cuerpo, la regulación de la respiración y la regulación de la mente. El Cuerpo tiene que ver con la parte física de la experiencia, la Mente es la parte cognitiva y la Respiración es el nexo de unión entre ambas. Esto es debido a que la respiración tiene un control involuntario y otra parte voluntario. Esto implica que puede ser una actividad tanto automática como intencional. Podríamos decir que la Respiración es el puente que une la brecha entre dos mundos, el consciente e inconsciente o la mente y el cuerpo.
A grandes rasgos, la Regulación del Cuerpo tiene que ver con la relajación y alineamiento; la Regulación de la Respiración consiste en encontrar un equilibrio natural que permita fluidez, profundidad, uniformidad y calma; y la Regulación de la Mente es un ejercicio de consciencia del presente.
Estos tres aspectos son interdependientes y no se pueden alcanzar por separado. No se puede calmar el cuerpo si la respiración está agitada y la mente dispersa, no se puede regular la Respiración con tensión o mala postura en el cuerpo o con la mente distraída y no se puede Regular la Mente si no es consciente de lo que pasa en el cuerpo o si la respiración está excitada.
Aunque debamos trabajar los tres aspectos simultáneamente, veremos a continuación con más detalle en qué consiste cada una de las tres Regulaciones por separado, haciendo hincapié en los efectos que se buscan, los métodos para realizarlas y los requisitos para alcanzarlas.
Regulación del Cuerpo
Uno de los elementos básicos del Qigong de Salud es la regulación del cuerpo. Tiene relación con el control que tiene el practicante sobre su propia postura corporal y movimiento en función de las especificaciones de la técnica que realiza. Podríamos definir la “Regulación del Cuerpo” como “Postura Adecuada” alcanzada mediante los movimientos adecuados a nivel óseo, articular y muscular. Esta regulación es sin duda, el primer objetivo que debe tratar de alcanzar un principiante.
Efectos de la Regulación Corporal
La Regulación del Cuerpo consiste en coordinar los movimientos del cuerpo con las actividades mentales y el flujo de Qi de manera que se puedan estimular mutuamente. Adoptar la postura adecuada y mover el cuerpo tiene el efecto de calmar la mente y cultivar el espíritu de manera que la regulación corporal es la base de la regulación de la respiración y de la mente. Como se dice en los textos clásicos, “El Qi no puede fluir suavemente si la postura es inadecuada, la mente no tendrá descanso si el Qi no fluye suavemente, el espíritu se dispersará si la mente no está en paz”.
Métodos de la Regulación Corporal
Aunque la postura y el movimiento sufren un cambio constante al final todo se reduce a andar, estar de pie, estar sentado o tumbado. Estas cuatro posturas básicas son las que los clásicos referían como “las cuatro posturas dignas” y las describían como “ponte de pie como un pino, siéntate como una campana, túmbate como un arco y anda como el viento”. En cada rutina de Qigong de Salud que practicamos o en las formas de Tai chi podemos ver una serie de acciones o movimientos al inicio que tiene como objetivo iniciar las regulaciones. Podemos ver a continuación algunos ejemplos de posturas para la regulación del cuerpo que son comunes y se adecuan a las características de las rutinas de Qigong de Salud.
Postura Natural
Pies paralelos a la anchura de la cadera, la cabeza erguida, presionando sin fuerza hacia arriba desde la coronilla (Punto DU20, Băi huì) lo que hace que la barbilla descienda suavemente. La mirada al frente relajada. Lengua en el paladar con la boca cerrada. Hundir los hombros y dejar caer los codos, dejando un espacio en las axilas. Hundir el pecho y extender la espalda. Relajar la cintura y el abdomen. Desbloquear las rodillas dejando que se hunda el peso. Las manos cuelgan relajadas a los lados del cuerpo.

Postura de sostener una bola
Desde la posición de la Postura Natural, las manos se elevan hasta colocarse delante del pecho, con los dedos enfrentados a una distancia de unos 10 cm entre ellos y las palmas mirando hacia dentro. Los codos quedan más bajos que las muñecas y estas ligeramente por debajo de los hombros. Al mismo tiempo relajar la cintura y las piernas, dejando que se hunda la ingle, flexionen las rodillas y caiga el peso hasta la planta del pie, manteniendo la pelvis nivelada y la parte superior del cuerpo erguida. La vista relajada al frente. Otra variante de este ejercicio es llevar las palmas frente al ombligo. El resto de instrucciones son las mismas.

Postura de una mano sobre otra.
Desde la Postura Natural se abren los brazos hacia los lados con las palmas hacia atrás manteniéndolos a la altura de las caderas. Se flexionan los codos, describiendo un círculo con las manos delante del abdomen como si se fuera a sostener una bola. Llevar las palmas sobre el Dantian, por debajo del ombligo, apoyando una sobre otra.

Requisitos para la regulación del cuerpo
Las diferentes rutinas, posturas y movimientos activan el cuerpo de distintas maneras induciendo diferentes regulaciones del cuerpo. Pero a pesar de la cantidad de variaciones en entrenamientos y resultados, siempre se respetan unos principios básicos.
- Intención: necesitamos la intención para activar el cuerpo, conseguir unas posturas precisas y un movimiento proporcionado y correcto que faciliten la circulación de Qi y Sangre en el cuerpo.
- Relajado y suave: el cuerpo está relajado pero no flojo, el movimiento debe ser suave, pero no débil, usar la intención en vez de la fuerza con tensión. Si el cuerpo entero está relajado y se mueve suavemente el Qi y la Sangre circularán sin interrupciones.
- Redondeado y flexible: en cada postura el cuerpo está redondeado y extendido, sin ángulos cerrados. Todos los movimientos deben ser redondeaos y flexibles, usando una energía redondeada en espiral y sin tensión ni rigidez.
- Continuidad: se debe realizar el movimiento a una velocidad uniforme sin paradas incluso cuando haya que acelerarse o enlentecerse. El flujo de Qi debe continuar aunque el movimiento se detenga y la intención mental debe seguir aunque el flujo de Qi se contenga.
- La cintura es la llave de todos los movimientos: esto incluye dos aspectos, la relajación de la cintura es la clave para la relajación de todo el cuerpo. Además la cintura es la que dirige el movimiento de todo el cuerpo. Como afirman los clásicos, “la fuerza se inicia desde los pies, se domina desde la cintura y se expresa en las extremidades”.
- Distinguir entre lo sólido y lo vacío: Esta es la clave para mantener el cuerpo erguido durante la ejecución de la rutina. Traslada el peso del cuerpo con los cambios de postura. En cada movimiento aprende y experimenta el patrón de cambio entre vacío y lleno para poder mantener el equilibrio del cuerpo.
- Coordinar la parte superior con la inferior del cuerpo: el cuerpo al completo debe moverse como una unidad durante la ejecución de la rutina. Los requisitos para la postura de las manos, ojos, estructura corporal y pasos no son los mismos que se necesitan en Wushu, pero es necesario mantener la integridad de las posturas y coordinar el movimiento de la parte superior e inferior del cuerpo, las manos y los pies, codos y rodillas y hombros y caderas.
- Coordinar la respiración: la respiración es crítica en el Qigong de Salud. Generalmente inhalaremos en los movimientos de apertura y elevación y exhalaremos en los de cierre y descenso. El principio que rige la respiración es que debe ser “natural y cómoda” y debeos estar cómodos en los movimientos antes de tratar de incorporar la respiración.
Material extraído de los apuntes del curso de Formación en Qigong de Salud